domingo, 20 de septiembre de 2009

QUE ES UN SOPLO LA VIDA


SILENCIO

Escucho el silencio, me gusta hacerlo. Paseo sus bosques, me pierdo en el verdor del musgo que crece sobre las piedras, recorro la vereda de sus afluentes con la mirada puesta en el río. Después de todo, parece que esto, que se llena y se llena aunque a veces haya estado vacío, es el silencio.


"Lisbon Chillout Tour" (Mir, No Lisboa 2008)

PALABRAS

¿No os ha pasado alguna vez? Querer nombrarlo, sentir que cada letra, cada signo, completa sólo una ínfima parte de una espiral que tiende al infinito.


"La espiral" (Mir, Tanger 2009)

PACIENCIA

Es difícil poder decir que uno sabe lo que es la paciencia. Sólo algunos, después de un largo retiro espiritual, parecen tenerla.
La tranquilidad, hacernos visibles-tirarles piedras después de todo, es, si no, lo que queda.


"Vecinos: El Tiempo Pasa" (Mir, El Berrueco 2008)

GRITAR

De alegría. Porque si gritamos de dolor, parece que grita la tierra entera. Y cómo saber si es verdad o no que estamos en lo cierto.
¡Gritad! Después de todo, nunca lo sabremos a ciencia cierta.


"Café A Brasileira: Pessoa" (Mir, No Lisboa 2008)

MÚSICA

¿Qué es para ti la música? Preguntó el cantautor al saxofonista.


"Músico en el Retiro" (Mir, Fotografía Digital UPA 2008)

DEMASIADA FELICIDAD

Camarón De La Isla - La Leyenda Del Tiempo






2 comentarios:

JOSE MARIA CASI dijo...

Me sobran las palabras. No hubieran querido decir nada por mucho que las obligara. Aun así salen: son valientes: pero se quedan calladas. ¡Espera! ¡Ahora hablan!:
Podría escribirte unas palabras en este comentario, pero se perderían en otra espiral igual de infinita. Podría decirte que me ha gustado; mucho; todo. Si eso te sirve a i, me vale: ME HA GUSTADO MUCHO.
Podría escribirte en silencio, pero hace tiempo que no estoy solo del todo. No quiero perder la paciencia y empezar a gritar. Dicen por ahí que el silencio es el alma de las cosas, aunque igual ya lo sabías.
Ya ves, lo mío no es lo de comentar; prefiero volverlo a leer.

Paloma G. Poza dijo...

A veces los pasos de dos desconocidos confluyen... en una estrella o en una ciudad en la orilla de un rio. Desde mi estación abandonada a tu Estación Mir.