jueves, 29 de octubre de 2009

Mapa de los Sueños II


Sin Título, Txema

Llegaron en un coche gris. Peinaron la zona en busca de alguna prueba. La pista de unas colillas en el suelo les condujo hasta la entrada de un pasadizo subterráneo que terminaba en una habitación.

Estaban allí, dormían. Hubo que despertarlos pues no reaccionaban con nuestra presencia, llevaban mucho tiempo en la misma posición y no querían salir. Días atrás habían centrado todos sus esfuerzos en la incierta esperanza de conseguir huir, sabíamos que lo habían intentado hasta que lo único que pudieron hacer fue seguir descendiendo por la gruta.

Había hojas de periódicos viejos esparcidas por toda la estancia.

- Sigan la fecha amarilla, por favor ...-. La lluvia precedía sus pasos hacia el exterior y, pronto, el sonido de los coches, el aire nocturno, el paisaje todo rodeado por una niebla insoportable que oculta cualquier posibilidad de comprensión. No conseguían recordar dónde estaban, cómo habían llegado a esa ciudad ni porqué estaban allí.

La vida que transcurría ante sus ojos marchaba en sentido opuesto, como las imágenes de una película rebobinando en busca de la memoria conocida, un principio. Cuando llegan a ese punto el obturador se abre, la luz que penetra es cegadora y quema el negativo, la fotografía se vela.


Sin Título, Txema

Unos pasos se acercan, eres tú. Estás despierto, pero tienes las manos llenas de sangre, dices que ha sido el coyote, que temblaba y temblaba y reía, que todo lo que ha pasado ha sido un sueño, que yo lo soñaba antes de que llegaras a la habitación donde duermo y abrieras la puerta.

- Ahora todo descansa allí afuera-. Señalas por la ventana hacia la calle, se ve la catedral, pero noto que todo es distinto. Algo ha debido cambiar mientras te esperaba, tú ya no eres el mismo. Miro lo que hay detrás de ti pero solo consigo distinguir una negrura espesa, no hay nada más.

-¿Qué haces ahí parada? ¿Es que no vas a cruzar?-. Acompaña su increpante pregunta con unos ojos fijos que intentan sacarme del estado de sopor en el que me encuentro, pero no debe de preocuparle demasiado, se marcha dejando una nube de polvo tras de sí .

Entonces me doy cuenta de que estoy en mitad de la carretera, me pesan los párpados. Distingo las aspas gigantes de unos molinos de energía eólica y un cielo rosa y azul que lo engulle todo -esa hora mágica en la que se paran los relojes, cuando la ficción se desempolva el tiempo de encima y la vida queda suspendida entre el principio de la noche y el final de la luz del día -. Acerco la mano hasta la frente, un pequeño abultamiento surge en su zona izquierda, he debido de golpearme. Salgo del asfalto y me siento a descansar. Sigo en el mismo sitio durante un buen rato, tengo la mente en blanco.

lunes, 26 de octubre de 2009

sábado, 24 de octubre de 2009

Mapa De Los Sueños I


"La parte de atrás" (Mir, Vitoria-Gasteiz)

Tienen ojos en la punta de los dedos
como sangre que fluye
bajo la acera por la que caminas
hacia la puerta de tu casa
la puerta de un convento
las puertas, todas
se abren
y saben que aunque finjamos
o hablemos
escuchamos cada copo de nieve
tendido en la acera
donde los niños juegan
a olvidar
el mundo brota
en cada una de nuestras espinas.

Los chicos se fueron nadando
acompañados por un enorme elefante-sonriente-de pánico
su mascota,
para acabar de cuclillas
en la escalinata de una piscina
atestada de gente perversa y tumbada
toallas,
atriles para músicos estériles
de viva vida
¿y qué más?
Tú quizás.

Serpentean entre cicatrices
que parecen caminos arados por bueyes
como manadas, oleadas
se que puedes matarlos
atarlos al cabestrillo de tu cama
bailar alrededor suyo
- ¡Indios!
Somos indios,
olvidados
como indios ficticios
de una leyenda perdida
entre los restos
de una rutina.

Mapa De Los Sueños (Intro)


PERIÓDICO


"La diferencia" (Mir, Av. Gasteiz)

Tienes la palma de la mano abierta
como juncos
como hiedra
escalan
los huesos que forman tus huesos
-falanges-
hasta el mismo centro donde el envés se hace oquedad
cierta risa nerviosa
que toma un lápiz
para hablar
para rehuir cierta (poca) gracia
que tiene un chico sentado a tu lado,
coge el móvil
saluda a la audiencia
quizás no te has dado cuenta, le aprecias
como aprecias a un pequeño hermano
que balbucea como lodo apilado
en la chimenea
y quieres hacer la gracia
pero sabes
que te da
bastante pena
no importa
aquí estamos robando rosas
entre peldaños
y surcos de agua en la arena...

Cuando una hoja seca cae en tu mano
vuelve a aparecer

la playa, el sol, la tierra

donde tus pasos me buscan
como al agua salada
sabes que tengo una carta
y sabes que me da igual
a ti te lo perdono todo
porque te quiero, te veo

(no te pongas tan serio leyendo el periódico
que me da tanta pena...)

viernes, 23 de octubre de 2009

NUNCA ES SUFICIENTE, SIEMPRE ES DEMASIADO


"Caracolas, conchas y otros esqueletos marinos derramándose en el espacio" (Mir, Tirso de Molina 2009)

Siento que mi alegría no sea completa, pues me duele
que los pájaros se vuelvan tranvías
las rosas lloren pétalos rojos
las tejas solo miren el cielo, pobrecitas...
Los aviones pasen rozando el suelo con el aire
las gaviotas vuelan sobre la cresta de otras olas
las sonrisas que devuelven tu sonrisa, son otras
Mejor que sentirme triste
dejar que las gaviotas se posen sobre el techo del tranvía
los pájaros alcen el vuelo a la par que ese avión
las olas se arrojen hasta la orilla
el cielo peine la cresta de tu sonrisa...
Y crezcan también allí donde arrojamos flores
o tejas.

domingo, 18 de octubre de 2009


"Cuando todavía era Tereshkova: El Principito" (Mir, Av. Gasteiz)

miércoles, 14 de octubre de 2009

33 ESPACIOS QUE HABITAMOS

A saber quién
con fríos pasitos
se acercó por la noche hasta nuestra cama.
Puede que fuera él
-puede que fuera él-.
Hace días que no lo veo, meses
que no se deja ver.
Intuyo su olor a gasolina
su sabor a exótica bebida
su sonrisa fresca, como él.
Siempre que me doy la vuelta
vuelve a aparecer:
sonriendo como un cretino
maldiciendo en irlandés -con acento de peregrino,
la mirada fija en el crucifijo de la pared.
Cierro los ojos y ya se ha ido
ya se ha ido
YA SE HA IDO.

Vivo entre cuatro paredes,
estoy tranquilo. Alquilo habitaciones en pisos dormidos. Cojo
trenes
subo
escaleras
bajo
peldaños
y llego 
al andén.
Siempre me paro en el mismo lugar
antes
de volver
a tejer trenes, rodar escaleras, ESQUIVAR los peldaños
y llegar 
al andén.

Nunca he vivido en una habitación triangular
Ha de ser un LUGAR especial 
Siempre que el resto de la casa sepa ADAPTARSE a él

Cuatro veces salí a llamarte a la ventana
PERO cuando parecía que ya finalmente nunca llegaría
mi voz retumbaba convirtiéndose en eco de mis PALABRAS.

jueves, 8 de octubre de 2009

NUBES QUE SE MUEVEN





Everything is changing so quickly that it' s hard to say: I am the same person, you are the same one ...
Solo la expresión fugitiva que escapa de tu gesto alcanzará.

miércoles, 7 de octubre de 2009

ANOTHER NIGHT IN


"Another night in" (Mir, Av. Gasteiz)

“Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma.
Y que una compañía no significa amar, y uno empieza a aprender… Que los abrazos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos, y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno del mañana es demasiado inseguro para planes…y los futuros tienen su forma de caerse por la mitad. Y después de un tiempo uno aprende que una planta su propio jardín y decora su propia alma.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno es realmente fuerte, y uno aprende y aprende…y así cada día. Con el tiempo te das cuenta de que si estás con una persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla. Con el tiempo aprendes que amar a alguien y que alguien te ame a ti es un milagro.
Con el tiempo aprendes que las imágenes que has visto siguen hiriéndote durante mucho tiempo. Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar…lleva su tiempo.
Con el tiempo comprendes que si has herido a alguien duramente, es muy probable que su amor jamás sea igual. Con el tiempo te das cuenta de que aún siendo feliz con tu pareja, lloras por aquellos que dejaste ir. Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible. Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estaba viviendo contigo. Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado, añoras a los que se marcharon. Con el tiempo aprenderás a perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que anhelas ese abrazo…,pues ante una tumba ya no tiene sentido. Pero. Desgraciadamente, sólo con el tiempo…”
J.L. Borges

jueves, 1 de octubre de 2009

NO TE LO MERECES

¿Sabes? Todas las tardes cuando empieza a anochecer hay una ciudad en las nubes. Creo que esta ciudad en miniatura que vemos desde aquí debe estar cerca de Pekín. Han cultivado Pawlonias durante miles de años. La Pawlonia de tormenta es un árbol que crece sobre el viento, ya sabes que esparcimos sus semillas allí y que casi a la vez llegó aquel perro que se sentó también allí. Luego los comandantes del Ejército rojo cavaron trincheras que separaron tu pueblo del mío y antes de que nos diéramos cuenta, no queda nadie, todos se habían ido, emigraron a las tierras altas donde crece la parra y recolectan la uva para hacer ese delicioso vino.  

Puede que la bruma, puede que tal vez el sol ...  Pero Nibruma Nisol esconde este paraíso celeste que nosotros podemos ver, de verdad, desde esta orilla (escotilla, quiero decir). Justo antes, poco antes casi, al mismo tiempo que volvía a pasar la misma pequeña y hueca-deshilvanada nube etérea, dijiste ¡un avestruz! Creo que no lo viste bien, mi amor, te habías quitado las gafas, ¿recuerdas? Y no lo viste bien, mi amor, aquello era un diplodocus comiendo hojitas de Árbol de Lluvia. Y un poquito más allá, el cielo naranja sobre las playas del Himalaya.